Brinkando en la Escuela
Brasilda dos Santos Rocha
2023 – 1ª edición
189 paginas
Por R$55,00 or U$20 (incluindo envio)

Al llegar a la primera serie del primer ciclo, los niños ya se encuentran alfabetizados, pero castrados en su deseo del jugar. Es un corte abrupto en su niñez, de un deseo tan necesario en cambio de adquisición del simbolismo de la lectura y de la escritura, efectuado de modo agobiante.

Nuestra propuesta de trabajo está norteada por supuestos reichianos, basándose en el concepto de la fórmula de la vida, asociados a conceptos simbólicos y significados de los juguetes, para que el profesional en el contexto educacional pueda desarrollar un rol activo ante el educando para direccionar el flujo energético.

En sus varias partes, este libro explica cómo y por qué estas técnicas facilitadoras propician el proceso de aprendizaje, teniendo como objetivo al niño y su relación con el profesor, de modo sincronizado, para que el proceso se concrete.

Presenta un trabajo de carácter pedagógico y profiláctico, fundamentando los conceptos básicos por algunos autores (Melanie Klein, Armida Aberastury, Donald Winnicott, Wilhelm Reich y Brasilda Rocha); transcribe formas de intervención y prácticas que puedan favorecer el aprendizaje y rescatar el placer en la relación escolar; presenta los resultados de la intervención efectuados en seis ciudades del país.

El libro tae una serie de ilustraciones detalladas de casos aclaradores, y propone la conclusión que nos permite reafirmar el jugar como grounding, por el hecho de que cada juguete posee su carga energética y capacita al niño a movilizar contenidos saludables inherentes a su proceso de desarrollo psíquico.

La relevancia de esta investigación está en la contribución para los educadores que, en el espacio escolar y social, vivencian no solo una reflexión, sino también medidas prácticas, como mediadores en el proceso de desarrollo del niño; propiciando manejos de técnicas facilitadoras para este proceso de enseñanza y aprendiaje y desempeñando su función social de forma placentera y alegre.

Presentando los aspectos prácticos y teóricos de ese nuevo campo de investigación, la autora propone que ese proceso pueda ser vivenciado en la escuela si el rol del educador en la relación psicopedagógica favorece la expresión de afectos y/o emociones del educando, propiciando la liberación de la capacidad respiratoria y consecuentemente del aprendizaje. En este sentido, es fundamental que el profesor pase por este proceso y reconozca en sí su niño bloqueado y recalcado en un mundo sin significado,

impidiéndolo de desempeñar su rol como educador y que pueda promover amor y alegría.

Estar atento a la seriedad del jugar de un niño fue nuestro objetivo y eso significa el reencuentro con su placer y como forma de descargar culpas, miedos, ansiedades y emociones.

Ese es también un acto educativo, pues la educacon no se reduce a la transmisión de un cierto conocimiento, sino que presupone encuentro donde lo transmitido se basa en el saber existencial, el cual es vinculador de ideales de orden imaginario.